En una fría habitación de hotel, Joseph Murdoch despierta lleno de confusión y desorientación dentro de una tina de baño. En esa misma habitación yace asesinada una prostituta. Murdoch sólo tiene vagos recuerdos de quién y es y cómo ha llegado ahí, toda su memoria le muestra trozos inconexos de recuerdos. Poco a poco su confusión comienza a desvanecerse, Murdoch se percata de que él es el asesino de prostitutas del que hablan en los periódicos y a quien la policía busca incesantemente.
Murdoch, en búsqueda por saber quién es (recurso poco original en una película, no obstante aquí funciona) descubre que la ciudad donde vive no tiene nombre; su realidad cambia cada día, las personas tienen una identidad nueva constantemente y no tienen ningún recuerdo de eso, no hay manera de salir de esa ciudad, la noche es perpetua, indeleble, la luz del día es una anécdota en la mente de las personas que nadie puede constatar. Extraños personajes -todos ellos masculinos- con enormes poderes mentales cambian el entorno físico de la ciudad, la identidad y recuerdos de la gente, en pocas palabras, cada noche en punto de las 12 transforman la realidad, usando a las personas como ratas de laboratorio.
Joseph Murdoch deberá enfrentar todo esto solo, pues es el único inmune a la imposición de realidades, el único que se percata que todo cambia en pocos minutos, su esposa (Jennifer Connely) juega un papel importante para él, pues debido al amor que siente por ella quiere solucionar de una vez por todas su confusión existencial (nunca mejor dicho) y demostrar que no es un asesino de mujeres. El Doctor Schreiber, único humano al que le han permitido conservar una parte importante de sus recuerdos utilizará sus conocimientos psiquiátricos para ayudarlo, será uno de sus escasos aliados, pues sin saberlo, Murdoch es la clave para despertar a la ciudad y sus habitantes de una noche demasiado larga.
Esta película que si bien tiene ciertas carencias o fallas resulta sumamente interesante, (de lo contrario no la mencionaríamos en esta columna) tiene un diseño de producción bastante bueno, con una fotografía que ayuda a resaltar el principal elemento de la trama, -la noche eterna-, esto añade una cierta dosis de cine negro.
No sólo cine negro tiene esta obra, pues es una película que incluye cine fantástico, suspenso y ciencia ficción, que muestra situaciones que en determinado momento pueden antojarse de inverosímiles, pero para ello se requiere la complicidad del espectador, pues es necesario dejarse llevar por todo el caudal de las situaciones hipotéticas que nos describen en ella.
El cambio constante de realidades o personalidades no es algo nuevo, directores como David Lynch en películas como Lost Highway o Mullholland Drive lo utilizan de manera recurrente y de forma similar a como lo muestra Alex Proyas, director de esta película, mostrando los anhelos del protagonista, un Elegido que debe luchar contra situaciones imposibles o mentalmente desquiciantes, alguien que está completamente solo, cuyo viaje y experiencias que deriven de esta jornada son la semilla para un futuro mejor.
Cierto, estas premisas no son originales de ninguna manera, pero en este film se muestran de forma fresca, con el suficiente grado de atracción para no perder nuestra atención, pues elementos que ya habíamos descrito como el diseño de producción y la fotografía hacen una buena ejecución con el vestuario, la banda sonora, por supuesto un muy buen trabajo de conjunto de parte de los actores y un correcto desempeño del director.
Lamentablemente esta película no fue un éxito de taquilla, pienso que merecía algo más del conocimiento popular, al no ser una película saturada de efectos especiales y vistosas peleas como Matrix (que dicho sea de paso, se nutre de varios elementos de Dark City, quien ya haya visto ambas no me dejará mentir) muchos en su momento no acudieron a las salas; no obstante quizá esta situación haya sido su mejor aliada, pues Dark City ya comienza a ser catalogada como cinta de culto.
Quizá el mayor defecto que le encuentro a esta película es su duración, pues 100 minutos parecieron algo insuficientes, pienso que se necesitó más tiempo para describir con más detalle algunas situaciones; los primeros minutos tampoco fueron muy de mi agrado, pues tienen una estética con corte televisivo, es decir, no está mal pero siento que está fuera de lugar, no obstante es una película que recomiendo a todos los amantes de la ciencia ficción o la fantasía, pues si buscan un film de acción éste no es el lugar apropiado.
He aquí el comentario que el afamado escritor de comics Neli Gaiman hizo sobre Dark City:
"Dark City es más que una fusión de temasde comics y ciencia ficción en una películade fantasía; una mezcla llamativa postmodernista,que rápidamente me pone en la mente del protagonista de la ciudad nocturna de somnópolis en los comics de 'Mr. x', los Cenobitas de Clive Barker,los navíos aéreos de terry Gilliam,todo combinado con un dejo de Kafka y una pizca de Theodore Sturgeon, visualmente astutaen todo sentido."
Año: 1998 Nacionalidad: USAGénero: ciencia-ficción Duración: 115 m.Director: Alex Proyas Intérpretes: Rufus Sewell (John Murdoch), William Hurt (Inspector Bumstead), Kiefer Sutherland (Dr. Schreiber), Jennifer Connelly (Emma), Richard O´Brien (Hand) Guión: Lem Dobbs y David Goyer Fotografía: Dariuz Wolski Música: Trevor Jones Montaje: Dov Hoenig
1 comentario:
hola antrax aprovecho para saludarte ya que hace tiempo no lo hacia espero estes bien,ojala lo leas, espero poder platicar contigo en la covacha otra vez,ojala coincidamos ahi saludos carlos alias Niño Zoquete
Publicar un comentario